Lavanda Beach

El diario de Maryam: 'Lo que no tengo a quien contar'

31 de agosto de 2021

Lavanda Beach

El despertar en nuestro hotel barroco Elegance no ha estado mal, se nota que estamos junto al mar porque dormimos todas las noches a pierna suelta. El desayuno ha sido copioso a base de frutas, aceitunas, tomates, lechuga, huevo duro, bizcocho y tostadas.

Luego estuvimos tranquilas con calma hasta que decidimos irnos a la playa en tranvía. Sacar el billete en turco fue tal episodio infructuoso que optamos por un taxi.

La playa de Konyaalti se extiende por 7 km que no dudamos en pasear, a 34 grados, como si no hubiera mañana. A la mitad no nos quedó otra que parar a reponernos con un zumo de zanahoria y naranja porque estábamos desecándonos. La playa es de piedras, pero tiene unos chiringuitos preciosos y un mar azul verdaderamente turquesa súper limpio.

Elegimos uno que se llamaba Lavanda Beach con tumbonas malvas, flores y sombrillas blancas, nos atendieron como reinas. Fue un día de marquesado. Cuanto se tendría que aprender en España del servicio turco.

Por la noche fuimos a cenar, por recomendación de mi alumna Peri Erdagi (siempre he tenido alumnos geniales, que me suelen acompañar en todos mis viajes. GRACIAS A TODOS POR SEGUIR EN MI VIDA DESPUÉS DE TANTOS AÑOS) al restaurante 7 Mehmet donde nos deleitaron con unos mejillones al vapor con salsa de verduras y una lubina a la parrilla súper sabrosa.

Mañana nos encontraremos con Serckan en la playa de Lara, creo que Isa no va a dormir esta noche.

Deja un comentario